RESUMEN
El proyecto se creó y se desarrolló tomando en cuenta la dificultad que los estudiantes de
sexto grado de educación básica presentan para aprender los algoritmos, funcionamiento y
aplicación de la potenciación matemática y su proceso de aprendizaje.
Se tiene presente que los niños en las edades de 10 a 12 años plantean o formulan preguntas
como: ¿Para qué me sirve esto en mi vida? ¿Cómo aplico esto en mi diario vivir? En base a
esto se pensó en la creación de una estrategia didáctica basada en la utilización del juego
para la enseñanza de la potenciación.
Los resultados que se obtuvieron en la prueba diagnóstica demostraron que tenían muchas
falencias en el dominio de la potenciación (propiedades, procedimiento y aplicación). A
medida que se desarrollaron cada una de las actividades programadas en el proyecto, se
percibió los avances e interés por el tema. Al realizar la prueba final y comparar los resultados
con la prueba diagnóstica se pudo sentir la gran satisfacción de ver que los resultados eran
positivos ya que los estudiantes alcanzaron un nivel más alto en las estadísticas, a diferencia
de las iniciales; es de notar que un pequeño porcentaje de niños todavía siguen teniendo
dificultades para desarrollar correctamente el algoritmo (proceso) de la potenciación.
Las matemáticas es en gran parte, juego, y el juego puede en muchas ocasiones, analizarse
mediante instrumento matemáticos. Pero por supuesto existen diferencias substanciales entre
la práctica del juego y la de la matemática. Generalmente las reglas del juego no requieren
introducciones largas, complicadas, ni tediosas. En el juego se busca la diversión y la
posibilidad de entrar en acción rápidamente. Muchos problemas matemáticos, incluso algunos
muy profundos, permiten también una introducción sencilla y una posibilidad de acción con
instrumentos bien ingenuos, pero la matemática no es sólo diversión, sino ciencia e
instrumento de exploración de su realidad propia mental y externa y así ha de plantearse. Sin
embargo, es claro que al iniciar a los más jóvenes en la adquisición de los conceptos de la
matemática, el sabor a juego los impregna de mucha motivación e interés.
Está demostrado que el juego en la formación del individuo es muy importante y los niños
así lo demuestran, ya que por medio de las actividades recreativas su interés por aprender es
notable.